martes, 27 de octubre de 2009
ENTERRADOS VIVOS
Estamos hechos de otros.
De pronto alguien toca sin darse cuenta un hilo que conecta con esas vidas de los otros que llevamos dentro, y ellos, los enterrados vivos, comienzan a removerse queriendo salir de nuestro interior.
Echar tierra sobre los vivos es una mala inversión. No es cómodo andar por ahí con tanta gente protestando dentro de uno. Pero es algo bien frecuente.
De pronto alguien toca sin darse cuenta un hilo que conecta con esas vidas de los otros que llevamos dentro, y ellos, los enterrados vivos, comienzan a removerse queriendo salir de nuestro interior.
Echar tierra sobre los vivos es una mala inversión. No es cómodo andar por ahí con tanta gente protestando dentro de uno. Pero es algo bien frecuente.
lunes, 26 de octubre de 2009
domingo, 25 de octubre de 2009
UNA TARDE EN LA INDIA
Recorríamos en moto la costa oeste de la India. Habíamos parado delante de un hotel bonito y raro, que nos pareció abandonado. Era un chalet de dos plantas, color rosa pastel, con balaustradas y estatuas griegas de imitación que daban a una piscina ovalada. Un estilo entre colonial y mafia rusa. Se veía ya de lejos, en medio de la nada, frente a una inmensa playa de arena que parecía no tener fin. Nada alrededor. Mediodía. El cielo casi negro cargado de tormenta a punto de estallar. De vez en cuando un rayo de sol que lo revivía todo. Y nadie en el camino, nadie en ninguna parte.
Nos alojamos en ese hotel extraño que cuidaba un tipo silencioso, éramos los únicos. Y salimos a caminar por la playa.
El mar estaba revuelto por dentro, cualquiera que hubiera entrado habría tenido que luchar para salir. Al cabo de media hora, como si la estuvieran arrojando a baldazos miles de personas, cayó la mayor tromba de agua que habíamos visto nunca. En un minuto teníamos hasta el alma empapada. Volvíamos hacia el hotel y casi no veíamos el suelo. A lo lejos, como en un sueño, vimos un grupo de perros fantasmales que daban vueltas en círculo, aullando. De pronto se pararon y se nos quedaron mirando. Permanecimos allí, clavados, mirándonos de frente perros y humanos, en medio de aquella nada tan hermosa y apocalíptica.
A los diez minutos los perros desaparecieron, y al llegar donde habían estado aullando, vimos el cuerpo en descomposición de un animal que parecía haber sido también un perro. Casi no le quedaba carne entre los huesos, solo su dentadura y sus ojos saltones que miraban al infinito.
Llegamos al hotel con el agua en las rodillas, bajando en riada hacia el mar. Nos quedamos en silencio mirando por la ventana; entrábamos en calor.
Fue una tarde extraña que siempre recuerdo con una nitidez inusual. Como una intersección con otra vida, o con la muerte.
Nos alojamos en ese hotel extraño que cuidaba un tipo silencioso, éramos los únicos. Y salimos a caminar por la playa.
El mar estaba revuelto por dentro, cualquiera que hubiera entrado habría tenido que luchar para salir. Al cabo de media hora, como si la estuvieran arrojando a baldazos miles de personas, cayó la mayor tromba de agua que habíamos visto nunca. En un minuto teníamos hasta el alma empapada. Volvíamos hacia el hotel y casi no veíamos el suelo. A lo lejos, como en un sueño, vimos un grupo de perros fantasmales que daban vueltas en círculo, aullando. De pronto se pararon y se nos quedaron mirando. Permanecimos allí, clavados, mirándonos de frente perros y humanos, en medio de aquella nada tan hermosa y apocalíptica.
A los diez minutos los perros desaparecieron, y al llegar donde habían estado aullando, vimos el cuerpo en descomposición de un animal que parecía haber sido también un perro. Casi no le quedaba carne entre los huesos, solo su dentadura y sus ojos saltones que miraban al infinito.
Llegamos al hotel con el agua en las rodillas, bajando en riada hacia el mar. Nos quedamos en silencio mirando por la ventana; entrábamos en calor.
Fue una tarde extraña que siempre recuerdo con una nitidez inusual. Como una intersección con otra vida, o con la muerte.
jueves, 22 de octubre de 2009
NEUMAN
¿Por qué dolerán así? ¿Duelen al regresar? ¿O será tal vez que sanan sólo cuando regresan, y uno comprende entonces que llevaban doliendo hacía mucho, los recuerdos? Sé que viajamos en su interior. Somos sus pasajeros.
Una vez Argentina
Andrés Neuman
Andrés Neuman
miércoles, 21 de octubre de 2009
MI VIDA EN RE MENOR
Me he hecho una lista en spotify con música en Re menor. Ahora suena Toccata und Fuge in D-Moll de Bach.
Dice Diego que si uno encuentra el tono adecuado para contar algo, todo lo demás se produce con mayor facilidad. Hablábamos sobre el proceso creativo: hacer fotos, escribir libros; ese tipo de cosas. Pero en seguida me dí cuenta de que era un axioma. Me pude ver cláramente en distintos momentos pasados viviendo en un tono equivocado.
El Re menor es un tono melancólico, pausado, de tarde de lluvia tras una ventana de París, por ejemplo. A mi no me pone triste, me provoca una suerte de levitación que me pemite verme desde arriba, a un par de metros sobre mi. Me observo aqui abajo, escribiendo en mi blog, y miro las cosas que me rodean. Esto me permite aceptar mi existencia con un poco más de ternura y comprensión. La vida me da menos miedo.
Últimamente no recuerdo mis sueños. Por eso escribo menos en el blog y por eso ando más perdido que de costumbre, más incomodo en mis cosas.
Quisiera tener un tiempo extra que no cuente, que no sume. Me cuesta seguir el ritmo de mi propia vida.
Dice Diego que si uno encuentra el tono adecuado para contar algo, todo lo demás se produce con mayor facilidad. Hablábamos sobre el proceso creativo: hacer fotos, escribir libros; ese tipo de cosas. Pero en seguida me dí cuenta de que era un axioma. Me pude ver cláramente en distintos momentos pasados viviendo en un tono equivocado.
El Re menor es un tono melancólico, pausado, de tarde de lluvia tras una ventana de París, por ejemplo. A mi no me pone triste, me provoca una suerte de levitación que me pemite verme desde arriba, a un par de metros sobre mi. Me observo aqui abajo, escribiendo en mi blog, y miro las cosas que me rodean. Esto me permite aceptar mi existencia con un poco más de ternura y comprensión. La vida me da menos miedo.
Últimamente no recuerdo mis sueños. Por eso escribo menos en el blog y por eso ando más perdido que de costumbre, más incomodo en mis cosas.
Quisiera tener un tiempo extra que no cuente, que no sume. Me cuesta seguir el ritmo de mi propia vida.
viernes, 16 de octubre de 2009
POSTIZOS
A veces, cuando hablo, me sale la voz de otro. A veces hago cosas y no se porque las hago.
Llevamos dentro unos otros postizos que salen de vez en cuando y actúan por nosotros.
Llevamos dentro unos otros postizos que salen de vez en cuando y actúan por nosotros.
miércoles, 7 de octubre de 2009
viernes, 2 de octubre de 2009
REAL NIGGAS DO REAL THINGS
Hace tiempo que vengo sintiendo que nada de lo que me sucede frente a una pantalla es real. Ahora mismo escribo, y según van apareciendo las palabras en el monitor, noto cómo pierden autenticidad.
Me gusta la irregularidad de lo orgánico. Salir fuera y que pasen cosas.
Me encantaban los scratches de los 80 porque eran imperfectos, sonaban a disco apuñalado y te daba un vuelco el corazón. El DJ ponía los dos discos a la vez, y con una mano buscaba a toda velocidad el corte que quería rayar. Y los MC´s tenían que respirar más rápido para dar la réplica en directo, mientras grababan la pista.
Negratas de verdad haciendo cosas reales.
Me gusta la irregularidad de lo orgánico. Salir fuera y que pasen cosas.
Me encantaban los scratches de los 80 porque eran imperfectos, sonaban a disco apuñalado y te daba un vuelco el corazón. El DJ ponía los dos discos a la vez, y con una mano buscaba a toda velocidad el corte que quería rayar. Y los MC´s tenían que respirar más rápido para dar la réplica en directo, mientras grababan la pista.
Negratas de verdad haciendo cosas reales.
AYER NO GASTÉ UN EURO
Creo que viviendo en una gran ciudad y saliendo mucho a la calle, es todo un logro haber pasado un día entero sin gastar un sólo euro.
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