miércoles, 23 de julio de 2008

FORMAS

No se trata de romper moldes, sino los propios moldes; las formas que uno se impone y rara vez se replantea.

No importa tanto el aspecto de algo como su significado. Agradezco cada vez más los envoltorios simples, sin lacitos ni "espero que te guste". Algo de apariencia improvisada pero lleno de intencionalidad, que envuelva una idea sencila y cargada de significado. Que la forma responda solo a una manera aproximada en que esa idea se podía comunicar, casi como un boceto, algo inacabado, en bruto, donde se intuya un potencial que aún no está desarrollado.

Hablo de historias, de narraciones: fotos, libros, películas, no importa. Aplíquese, si se quiere, todo lo anterior también a las personas.

Sobre todo: no me den historias resueltas, donde todo se explique por la relación causa-efecto. Quiero ver personajes que no tengan respuesta para las preguntas que les acechan. Sino, no me puedo identificar.

Quiero tanto misterio como sea posible.