domingo, 5 de octubre de 2008

LAS 29 HORAS DEL 29 DE SEPTIEMBRE

6:40- Me despierto. Tengo que coger un vuelo a Milán. Mañana inauguro una exposición en el Cervantes.

7:40- Miro a Lucía dormida. La próxima vez que viaje habrá dos bellas durmientes de las que despedirme. Paula llega al mundo en una semana. Le pido susurrando en el ombligo de su madre que me espere. Me voy solo dos días; quiero estar para recibirla.

8:40- Barajas. T4. Control de acceso. Hoy no me parece tan pesado el proceso. Mi cabeza está en otro lugar.

9:40- Dos chilenas que se sientan a mi lado se santiguan en el despegue. El resto del viaje miran revistas del corazón.

10:40- El libro de Peio me atrapa. Pero anoche dormí poco y se me acaba mezclando con un sueño intermitente.

11:40- Llego a Malpensa. Me esperan un chofer y un copiloto impecablemente vestidos. En el asiento trasero de un Mercedes, camino al centro, parezco un mafioso con guardaespaldas. No dicen una palabra en todo el trayecto; yo tampoco.

12:40- Una pizza en via Dante mirando a la gente que pasa. La sangre siempre me hierve en Italia, despierta de un sueño lejano.

13:40- Comienzo a montar la expo: ésta aqui, ésta allá... Es curioso cómo dialogan las fotos. Una vez enmarcadas comienzan su propia vida. Algunas se emparejan por su cuenta, sin que yo pueda más que dar mi aprobación.

14:40- Llega Chicca con Max Pam y tomamos café. Si yo fuera lo suficientemente excéntrico y rico, viajaría a Italia solo para tomarme un café.

15:40- Suena mi móvil. Es Lucía. "He roto aguas", anuncia, "Pero estoy bien, no te preocupes".

16:40- Nunca me deja de sorprender la cantidad de personas que podemos llegar a ser en una sola. Cuando la tensión ambiental se dispara de verdad, yo tengo un tipo dentro que me sustituye y comienza a manejar las cosas con una sangre fría extraordinaria.

17:40- Camino del aeropuerto me doy cuenta de que no podía ser de otro modo. Hay una conexión geográfica y temporal que ha empujado a mi hija a elegir este momento para llegar.

18:40- Aguanta amor, ya llego. ¿Tienes contracciones? Muy espaciadas. Bueno, tranquila. En un par de horas estoy allí.

19:40- No lo pienses, no lo pienses, no lo pienses. Ni se te ocurra pensar en que algo malo pueda pasar.

20:40- Abrochen sus cinturones. Pongan la mesilla en posición vertical. En caso de despresurización de la cabina unas mascarillas caeran sobre ustedes. Para inflar el chaleco salvavidas tiren del enganche de la clavija. En esta parte siempre me concentro para saber como traducen al inglés "el enganche de la clavija", pero nunca me entero. Hoy menos.

21:40- Madrid. ¡Taxi!

22:40- La escena es almodovariana. Lucía retoca unas fotos entre contracción y contracción. María le hace masajes en los riñones cuando acecha el dolor y Laura no para de hablar tratando de rebajar la tensión. Los amigos que uno elige reflejan lo que uno es. Nada me ha enseñado tanto el valor de la amistad como el modo en que Lucía y sus amigos se quieren y se cuidan.

23:40- Hospital: nada, no estás de parto. Puede ser que se te pasen las contracciones en un rato. Eso no es dolor, ya verás cuando venga el bebé.

00:40- En los pasillos del hospital, retorcida a cada rato. Pero nos dicen que no es el momento aún. Una anciana trata de usar la cabina telefónica. Le pide cambio a Lucía mientras ella grita de dolor.

01:40- Volvemos a casa, el dolor es más íntimo aquí. Más nuestro.

02:40- Lucía ya no es más Lucía; es una hembra humana a punto de parir.

03:40- Cada 8 minutos.

04:40- Cada 5 minutos.

05:40- Cada 3 minutos.

06:40- Hospital de nuevo. Ahora si. Tienes 4 cm. Pasa a dilatación. ¿Quieres la epidural?

07:40- Que mala suerte, el anestesista está en quirófano de urgencia. No te preocupes, a las 8 cambia el turno y llega otro. Aguanta un poco mujer. Si, ya se que duele.

08:40- ¿Hola?, ¿hay alguien ahí? Si, oiga, nos dijeron que iba a venir un anestesista. Si, paciencia, y ¿cuanto cree que tardarán? Es que mi mujer parece la niña del exorcista. Vale, esperamos un poco más.

09:40- ¿Ahora mejor?, ¿no?. Si, es agotador, ¡empuja!, no se, dicen que ya está, que le queda muy poquito. No no tengas miedo, todo está yendo bien, esto es así. Bueno, ya se que no tengo ni idea, pero... Vale, me callo. ¡Empuja!

10:40- Joder, por favor, que termine ya, por favor, que salga de una vez. ¡Está agotada! Empuja, ya se ha colocado, ya llega. Mira, ya está aqui el doctor Callejas, que tanto te gusta. A la sala de parto.

11:40- ¡Empuja!, ¿pero tu no has ido a las clases de parto?, pues venga, lo mismo. Ahora, ya la veo. Un empujón más. Bueno, otro. El próximo seguro que ya... ... ...A ver, Lucía, levanta la cabeza, y el marido que se ponga aquí, voy a sacar a la niña... ... ... Amor, mi niña, mi tesoro. ¡Es nuestra hija!


Paula Costa Antebi nació en Madrid el 30 de septiembre de 2008 a las 11:40. No se por qué se da este dato, pero debe ser importante: pesó 2 kilos 950 gramos y midió 47 cm.